14-10-2013, 09:36 AM
Otros datos a tener en cuenta.
Separar los machos al inicio de la época de celo: Cuando empiezan los machos a entrar en celo, se pueden originar grandes peleas entre ellos, por lo que habrá que dejarlos separados (uno en cada jaula).
Elegir parejas: Si tienes varias parejas y no sabes qué macho poner con qué hembra, coloca un macho con todas las hembras, y observa con qué hembra se entiende mejor, y esa será la más adecuada para emparejar con ese macho. Con los otros machos, hacer lo mismo, uno a uno.
Si se tienen durante el invierno a todos los machos y todas las hembras juntos, es también posible según se va acercando el momento del celo, de ver que macho con que hembra van juntos a todos los lados, incluso durmiendo juntos en la misma percha.
Colocar la hembra una semana antes que el macho en la jaula de cría.
Observar comportamiento del macho: Cuando la hembra ha puesto los huevos, se debe ir observando cómo se comporta el macho, porque hay algunos que son muy fogosos y en muchas ocasiones molestan demasiado a la hembra, la hacen levantar del nido y muchas veces provocan la caída de los huevos del nido al fondo de la jaula, y aun picándola y desplumándola a la hembra en exceso. Si esto ocurre, desde que ponga el último huevo, se debe de colocar la rejilla y separar al macho de forma que se vean. La hembra puede criarlos ella sola. A pesar de todo, cuando son primerizos, es conveniente que la primera postura se deje juntos sin separar para observarlos y, según el comportamiento, proceder en consecuencia.
Temperatura adecuada del criadero: A los 7 días aproximadamente de estar incubando los huevos, la hembra acostumbra a levantarse del nido, y a veces tarda algo más en volver a echarse sobre los huevos. Por eso conviene tener una temperatura adecuada del criadero, o mejor aún seria un nido con calefacción.
Finalizada la cría separar machos y hembras: Una vez finalizada la cría, machos y hembras no se deben dejar juntos, sino que es mejor poner los machos con los machos y las hembras con las hembras.
Separar los machos al inicio de la época de celo: Cuando empiezan los machos a entrar en celo, se pueden originar grandes peleas entre ellos, por lo que habrá que dejarlos separados (uno en cada jaula).
Elegir parejas: Si tienes varias parejas y no sabes qué macho poner con qué hembra, coloca un macho con todas las hembras, y observa con qué hembra se entiende mejor, y esa será la más adecuada para emparejar con ese macho. Con los otros machos, hacer lo mismo, uno a uno.
Si se tienen durante el invierno a todos los machos y todas las hembras juntos, es también posible según se va acercando el momento del celo, de ver que macho con que hembra van juntos a todos los lados, incluso durmiendo juntos en la misma percha.
Colocar la hembra una semana antes que el macho en la jaula de cría.
Observar comportamiento del macho: Cuando la hembra ha puesto los huevos, se debe ir observando cómo se comporta el macho, porque hay algunos que son muy fogosos y en muchas ocasiones molestan demasiado a la hembra, la hacen levantar del nido y muchas veces provocan la caída de los huevos del nido al fondo de la jaula, y aun picándola y desplumándola a la hembra en exceso. Si esto ocurre, desde que ponga el último huevo, se debe de colocar la rejilla y separar al macho de forma que se vean. La hembra puede criarlos ella sola. A pesar de todo, cuando son primerizos, es conveniente que la primera postura se deje juntos sin separar para observarlos y, según el comportamiento, proceder en consecuencia.
Temperatura adecuada del criadero: A los 7 días aproximadamente de estar incubando los huevos, la hembra acostumbra a levantarse del nido, y a veces tarda algo más en volver a echarse sobre los huevos. Por eso conviene tener una temperatura adecuada del criadero, o mejor aún seria un nido con calefacción.
Finalizada la cría separar machos y hembras: Una vez finalizada la cría, machos y hembras no se deben dejar juntos, sino que es mejor poner los machos con los machos y las hembras con las hembras.