El género de las pyrrhuras esta conformado por diferentes especies de aves las cuales pertenecen a la familia de los loros (Psittacidae) y más específicamente a la de los conuros.
Se reparten por una gran parte de Sudamérica y Centroamérica.
Son animales que destacan por su gran hiperactividad ya que son muy nerviosas y muy juguetonas siendo papilleras.
Al contrario de lo que se podría pensar, las pyrrhuras no son aves escandalosas sino todo lo contrario son bastantes silenciosas siempre hablando de ejemplares papilleros o socializados.
En cuanto a su tamaño es muy parecido al de una ninfa pero mucho más robusto y según la especie de pyrrhura puede variar hasta 8 cm la talla y unos 40 o 45 g de peso.
Si bien no son tan exigentes como sus primos mayores, las ninfas requieren una jaula grande con espacio suficiente para trepar y colocar unos cuantos juguetes, perchas, espejos y objetos en general para entretenerlas mientras sus dueños no están en la casa. No se recomienda mezclarlas con otras especies, pues son tan tranquilas que pueden resultar atacadas por otras aves más extrovertidas (como los agapornis) aún si son más pequeñas que ellas.
Las ninfas son aves inteligentes, de carácter amable y prácticamente no presentan problemas de comportamiento. Se adaptan fácilmente a la vida familiar y aprenden a interactuar y comunicarse con las personas que aman. Su expectativa de vida es de alrededor de 15 años, pero con una buena dieta y agregando comida natural variada y muchos cuidados pueden llegar a vivir más de 20 años.
Su alimentación puede basarse tanto en mixtura especifica para ninfas y agapornis (se encuentra en todas las tiendas de animales), o en pienso específico para ninfas. También se pueden mezclar ambas dietas.
Complementaremos dicha dieta con un aporte de alimentos vegetales frescos, como naranja, plátano, manzana, pera, pimiento, zanahoria, pepino, lechuga, tomate, etc.
Y esporádicamente, también podemos ofrecerles algunas golosinas, como mijo en rama, barritas comerciales de miel con semillas, frutos secos y más. Para mantener a nuestros loros sanos, debemos proporcionar las atenciones adecuadas: alejar la jaula de los rayos de sol directo, la excesiva humedad y las corrientes de aire. Mantener la jaula y sus complementos (comederos, bebederos, juegos) bien limpios.
Hay que proporcionarle una alimentación sana y equilibrada, dando prioridad a la calidad sobre la cantidad.
Debemos procurarle la compañía de sus congéneres. No obstante, hay algunos síntomas que pueden hacernos sospechar sobre una posible enfermedad:
Si come o bebe en exceso. Si se mueve poco, esta decaído y se aparta hacia un rincón.Si tiene las plumas alborotadas, deslucidas, erizadas, o pierde plumas. Si tiene las alas caídas, los ojos hinchados, o permanece acurrucado y esconde frecuentemente la cabeza bajo ellas.Si respira con dificultad, tose, estornuda o desprende secreciones nasales.Si tiene las patas o vientre hinchados.Si las heces manchan las plumas de alrededor de la cloaca, evacúa con dificultad o tiene diarrea.
Las ninfas son unas preciosas aves del orden de los psitácidos que pertenecen a la familia de las cacatúas, aunque son bastante más pequeñas. Son originarias de Australia, donde se las puede hallar en todo el territorio.
Son muy apreciadas como mascotas por su carácter dócil y por ser mucho menos demandantes en cuanto a sus cuidados que los loros más grandes. Ellas se adaptan perfectamente a la vida en el hogar, son fáciles de cuidar y si se las educa desde pequeñas se convierten en unas mascotas adorables y muy cariñosas.
Las ninfas o carolinas se caracterizan por tener una cresta, como las cacatúas, pero su tamaño es mucho menor y no superan los 35 cm desde la cabeza hasta la cola. De esta longitud casi la mitad corresponde solamente a las largas plumas de la cola. Su color original es gris, con unas manchas naranjas en las mejillas y la cabeza y cresta amarillas, pero al criarlas en cautiverio se han obtenido otras coloraciones, como cobre, ágatas, perladas, pintos de verde, canela y lutinas o albinas.
Es importante acostumbrarlas al contacto con las personas desde muy pequeñas si quieres tener una ninfa que no sea agresiva. Por lo general ellas disfrutan de compartir algún tiempo con las personas y se apegan bastante a sus dueños, aunque a algunas no les gusta que los tomes en tus manos. Los machos pueden cantar y aprender a imitar unas cuantas palabras, pero son mucho mejores imitando sonidos, como melodías, sirenas, ringtones o el canto de otras aves. Las hembras vocalizan mucho menos pero suelen ser también más cariñosas. Sus manchas tienen colores menos vivos que los machos.
Hola amigos estoy detrozada,con la ilusión que tenía con mi pardillo y de repenete se ha muerto sin descomposición ni enfermedad ni embolado nada,esta mañana amaneció muerto.que mala leche tengo con los pardillos XXDD,,,,,,,,,,,,,,,,ya no se que pensar coño,en fin otro srá pero ahora es mal tiempo para hacerse con uno amigos
hola, tengo al jilguero con la canaria metidos en un jaulon de dos piezas y este año no creo que vaya sacar crias, mi duda es si tengo que meter al jilguero con la canaria en una parte del jaulon con rejilla puesta para que esten juntos o lo dejo sin la rejilla puesta? gracias
La alimentación del yaco o loro gris es fundamental para la actividad zootécnica. Una dieta correctamente equilibrada constituye una premisa ineludible si queremos lograr que se desencadene el proceso reproductivo. Podemos distinguir entre dos grandes tipos de dieta a utilizar según la importancia relativa que en cada caso tengan las semillas o el pienso extrusionado. Estas dietas tienen la ventaja de proporcionar una gran seguridad en cuanto a la completa cobertura de las necesidades nutricionales de las aves, pero tienen el inconveniente de la monotonía. Por esta razón, es conveniente complementar el pienso con otros alimentos de máxima apetencia, que proporcionen a los animales la variedad que no puede dar por sí solo el pienso. Con este fin puede prepararse mezclas de vegetales frescos troceados (fruta y verdura) y de semillas.
Por otra parte, tenemos las dietas clásicas, basadas en semillas. Estas dietas son, ya de por sí, más atractivas y variadas pero, en contrapartida, comportan un mayor riesgo de no cubrir correctamente la totalidad de los requerimientos de nutrientes. Estas dietas deben formularse correctamente, incluir vegetales frescos y complementarse con vitaminas y minerales. En el caso del yaco, es especialmente importante proporcionar alguna fuente añadida de calcio. Puede convenir también que la mezcla incluya algo de pienso extrusionado.
Las semillas pueden suministrarse en seco, remojadas, pre-germinadas, germinadas o hervidas. No hay ningún inconveniente en usar semillas de pequeño tamaño ( alpiste o mijo, por ejemplo) ya que pueden comerlas sin ningún problema, a la vez que les proporciona entretenimiento. El abanico de tipos a utilizar es muy amplio. Aunque los Yacos tienden a preferir las semilla más ricas en grasa, hay que procurar que la mezcla utilizada contenga cereales y leguminosas además de las oleaginosas. Aalgunas de las semillas que se pueden suministrar son: maíz, avena, alpiste, mijo, trigo, triticale, veza, soja verde, lenteja, habón, guisante, alforfón, pipa de girasol, cañamón, cardi, cacahuete, dari, calabaza, melón...,
En ambos casos el suministro de vegetales frescos es altamente recomendable ya que constituye una significativa fuente de nutrientes (sobre todo vitaminas) y cumple también una función de tipo psicológico: le proporciona el entretenimiento y la satisfacción que da la sensación de variedad y abundancia. prácticamente todas las frutas y verduras pueden ser usadas, a excepción del aguacate y algunas solanáceas, que por sentido común nunca tomaríamos crudas (berenjenas, patatas ). A título de ejemplo podríamos mencionar la manzana, el plátano, naranja, kiwi, melón, calabaza, cebolla, apio, zanahoria, tomate, alcachofa, pimiento, brócoli...
El Yaco o Loro gris de cola roja es un loro de tamaño medio. Su nombre describe perfectamente su aspecto; a excepción de la cola, que es de color rojo, tiene e cuerpo cubierto de plumas con distintas tonalidades de gris. El pico es de color negro y las patas son de color gris oscuro. mide alrededor de los 33 cm. de largo ( 28-39) y pesa unos 475 gr. (400-500 g.). Estas medidas son, sin embargo, muy relativas.
Las hembras acostumbran a tener un plumaje más claro que los machos, comparando siempre individuos procedentes de una misma zona geográfica. El aspecto general del macho es más robusto, la cabeza más plana y cuadrada, y el pico mayor en relación con las hembras.
Los individuos inmaduros tienen un peso y tamaño inferior al de los adultos y presentan también diferencias de coloración. En ellos, el color del iris puede ser muy oscuro cuando los animales tienen pocos meses, para asar luego a un color blanco-gris. En jóvenes de más edad es amarillo claro y, finalmente, en los adultos es amarillo intenso. La cola de un joven que todavía no ha mudado la pluma no es de color rojo inmaculado como en los adultos, sino que tiene un tono más oscuro sobre todo en el extremo.
Los guacamayos forman parte de la familia de los loros y son especialmente hermosos y coloridos.
Muchos guacamayos tienen un plumaje muy brillante. Su colorido encaja a la perfección en las selvas tropicales de América Central y del Sur, con sus verdes hojas y sus frutas y flores de vistosos colores. Estas aves presumen de pico grande y robusto, que rompe con facilidad frutos secos y semillas. Su lengua seca y escamosa tiene un hueso que las convierte en una eficaz herramienta para golpear las frutas.
La forma de las patas de los guacamayos les permite agarrarse a las ramas y coger, sujetar y examinar todo tipo de cosas. Estas aves lucen con elegancia sus colas, que son muy largas.
Los guacamayos son aves inteligentes y sociales que suelen juntarse en bandadas de entre 10 y 30 miembros. Sus graznidos y chillidos retumban a través de la selva. Además, vocalizan para comunicarse con los demás miembros de la bandada, marcar territorio e identificarse entre ellos. Algunas especies incluso imitan el habla humana.
Las bandadas duermen en los árboles por la noche y por la mañana vuelan largas distancias para conseguir frutas, frutos secos, insectos y caracoles con los que alimentarse. Algunas especies también comen tierra húmeda, lo que les ayuda a neutralizar las sustancias químicas de las frutas y a relajar el estómago.
Los guacamayos se emparejan para toda la vida. No sólo se aparean juntos, sino que también comparten la comida y se acicalan juntos. En la época de gestación, las hembras incuban los huevos mientras el macho sale a cazar y lleva comida al nido.
Hay 17 especies distintas de guacamayos y muchas están amenazadas. Estos traviesos animalitos son muy apreciados como mascotas y muchos son atrapados de forma ilegal para abastecer este mercado. Las selvas tropicales, donde viven muchas especies, también están desapareciendo a un ritmo alarmante.
Los guacamayos jacinto, de frente roja y de garganta azul están amenazados. Los guacamayos glaucos y de spix probablemente ya estén extinguidos en la naturaleza.