30-06-2014, 09:18 AM
Bandos de más de 70 aguiluchos cenizos se han visto en Africa del Norte durante el largo vuelo migratorio otoñal entre sus territorios de cría en Europa y sus cuarteles de invierno, que a menudo son tan lejanos como el Cabo de Buena Esperanza.
En España cría por casi todo el país en zonas despejadas, amplias praderas con hierba alta, mostrando particular interés por las grandes extensiones de cultivo de cereal.
Es ave estival que suele llegar a sus lugares de cría hacia finales de marzo en las zonas templadas y durante el mes de abril en la parte septentrional de España. Normalmente llegan ejemplares sueltos que se dedican los primeros días a vagabundear por lugares cercanos, viéndose incluso en zonas altas, lo cual puede deberse también a aves en migración hacia otros puntos de Europa.
Una vez establecidos en sus zonas de cría, se entregan a unos acrobáticos vuelos que denotan la espectacular parada nupcial; en ella macho y hembra vuelan elevándose a bastante altura y lanzándose en picado con cabriolas, vueltas y nuevas subidas, todo ello acompañado de ligeros gritos de reclamo emitidos por los dos sexos.
Identificación: El macho tiene partes superiores grises, y se distingue del Aguilucho Pálido macho por estrechas franjas alares negras y obispilloRabadilla de las aves gris, no blanco; hembra más delgada que la del Aguilucho Pálido, con menos blanco en el obispillo.
Nidificación: La hembra construye nido de hierbajos, carrizos o hierba en el suelo de terrenos abiertos, tojares, dunas, arenales, marismas y en tierras de labor; puesta, mayo-junio, usualmente 4 ó 5 huevos blancos o azul pálido; incubación, alrededor de 30 días, sólo por la hembra; durante la incubación el macho se ocupa de la caza; los pollos, alimentados por ambos padres, vuelan tras unas 5 semanas.
Alimentación: Pequeños mamíferos, aves y ranas; algunos insectos, lombrices de tierra.
Hábitat: Cultivos.